EDIFICIOS SON CIUDADES

Cuando se recorren las calles de las ciudades se tiene la impresión del tiempo que ha tenido que pasar hasta conformar una imagen propia y particular respecto a las demás, respecto a lo general y de la misma manera una sensación de globalidad que se obtiene de todas las particularidades que lo conforman. Esta percepción es más difícil de entrever si nos circunscribimos al ente particular y es que no podemos desvincular la relación que van a tener dos universidades en la ciudad: tanto por la gran dimensión métrica como el impacto social que va a generar en su entorno. Ambos proyectos son deudores de este aspecto y comparten un desarrollo diferido en el tiempo. Debemos ver las plantas como fases o estadios de desarrollo. En el caso de la nueva facultad de geografía como el final del proceso que iniciaran otros arquitectos en un solar más pequeño y en el caso de la universidad de Barcelona como un paso previo a su última definición formal.
A pesar de situarse en escenarios urbanos diferentes, ambos edificios dan una respuesta a su entorno. En el caso de la universidad, situada deliberadamente en el límite del ensanche recoge con el eje central del edificio la trama urbana y a partir de ese momento se va desmenuzando en otros ejes menores hasta definir una malla interna rematada con un frente de fachada. Como queriendo dar permeabilidad a la trama de ejes que genera la ciudad respecto al edificio y definir un frente o remate hacia la parte más antigua de la ciudad. Una relación similar a la que se empleará en la facultad de geografía, que va ocupando todo el perímetro del solar en sus frentes. A pesar de que aparentemente en éste caso no se puedan apreciar unos ejes generadores, si estudiamos la distribución de los edificios que tiene en frente hay una clara voluntad de confrontar los accesos y por lo tanto de establecer unas líneas u ejes de continuidad. También compartirán la voluntad de querer introducir elementos de modernidad en fachada, en el caso de Elies Rogent influenciado por sus viajes a Europa sobre el 1869 donde tomó contacto con el Rundbogenstil y en el caso de las facultades ya en los textos anteriores a 1995 Cristian Cirici habla de introducir celosías de hormigón, muros cortina y otros elementos que en ambos casos les traería discrepancias con las autoridades.
Sí podríamos diferenciarlos por las características organización funcional. La concepción clara de un elemento central de gran tamaño y la distribución simétrica de las estancias a través de los patios en la universidad establece una uniformidad compositiva y una jerarquía institucional, con unas relaciones dimensionales tan rígidas que cualquier movimiento relativo en ellas, afectaría al resto del edificio, por lo que queda constreñida la funcionalidad de lo particular. Por el contrario, el modo en que se teje el espacio en las facultades se adapta al tiempo y a las dimensiones concretas que se tienen en el solar. Se ubican las salas más grandes donde se puede y los pasos para acceder a ellos se convierten más bien en unos recorridos mínimos necesarios. A partir de aquí cambian todos los conceptos de percepción, iluminación, apreciación del edificio que se tenga desde el interior.
Ambos edificios fueron ampliados, en el primero seríamos incapaces de distinguir cualquier traza originaria mientras que en las facultades podríamos diferenciar las adiciones que a lo largo del tiempo han surgido en cada propuesta e incluso hacer una lectura del entorno urbano aunque éste no existiera, pero hablar de esto ahora sería como plantear una arqueología del futuro.


Comentarios

Entradas populares